Un rato de melancolía

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Miguel y la fotografía

A Miguel le gusta experimentar, aunque no es muy paciente para las explicaciones. Con la cámara del teléfono ya pasó de la petición de que le tome fotos, a la solicitud del uso del aparato.

Bueno, ha habido muchas pruebas y resultados como éste:

Upps, una mesa

Pero con un poco de ayuda, ha logrado estas:



La madre y la tía

La mera madre

Otra de la madre y la tía

Bueno, no ha sido tan poca la ayuda

De gorila

Para el Halloween, Miguel se disfrazó de gorila. La historia de la petición de dulces la debería contar su madre. A mí sólo me dijo que hubo algunas personas que no le quisieron dar dulces. Citlali dice que le fue muy bien.
La emoción por el disfraz debió haber sido enorme. Según su madre, despertó envidias y simpatías. Excepto la de un niño que le pidió a su mamá que se lo llevara a otro lado, porque Miguel le rugía mucho.
Y más, cuando algún despistado le decía “ay, qué bonito disfraz de chango”, él se apresuraba a corregir, no sin mirar al sujeto con condescendencia, “es de gorila”
Para el dos, Día de Muertos, le pedí a mi hija que le volviera a poner el traje y lo maquillara.

Aquí esta una foto

Fue la sensación en el lugar en donde comimos. Se veía en los rostros infantiles que hubieran estado felices de ir también disfrazados, las niñas lo veían, y él, fascinado.
En algún momento se acercó otro chiquillo que lo veía con una envidia. Nada modesto el muchacho lucía su traje.
Más tarde fuimos a la sección de juegos.

Ahí Bertha le tomo este video

Miguel-kong

Aquí hay fotos de King Kong en la estatua de la libertad.







En fin, fue un completo éxito. El domingo siguiente me dijo, ¿Abuelo, verdad que va a haber otro día de Muertos?

Siguen más fotos